UN 21,2% MÁS QUE EN 2021, SEGÚN LA AEA

Los radares de la DGT pusieron cuatro millones de denuncias en 2022

La DGT podría poner más radares de tramo tras el adiós a los 20 km/h extra para adelantar | Getty Images
Ponle Freno
  Madrid | 22/05/2023

La Dirección General de Tráfico (DGT) realizó cuatro millones de denuncias en 2022, con más de 1000 radares colocados en España. Esto supone un incremento del 21,2% respecto al año 2021, como ha revelado un estudio realizado por la organización de defensa de los conductores Automovilistas Europeos Asociados (AEA).

Los radares más activos, según constata el estudio, se han localizado en Andalucía, con 953.422 denuncias formuladas (el 25,7% del total); seguido de la Comunidad Valenciana, con 447.470 (12%) y Castilla y León,con 427.448 (11,5%).

El radar más activo se ubica en el kilómetro 74,7 de la A-381,a la salida del túnel de Valdeinfierno, en el término municipal de los Barrios (Cádiz), con un récord de 79.258 denuncias.

Por su parte, las comunidades autónomas que menos denuncias contabilizaron son La Rioja (39.757), Navarra (83.231) y Asturias (83.993).

Y es que, solo 50 de los más de los 1000 radares que dispone la DGT, formularon el 28% del total de denuncias (1.036.054) y que, de ellos, 33 ya aparecían en el ranking de cinemómetros más activos del año anterior, según destaca el estudio.

La propia AEA ha advertido además que los radares han incrementado exponencialmente su actividad, como por ejemplo lo ha hecho el radar situado en el kilómetro 37 de la A-381 (Autovía Jerez-Los Barrios), que ha pasado de formular 17.666 denuncias en 2021 a 68.321 en 2022.

Los radares situados en el kilómetro 53 de la M-40, en Madrid, y en el kilómetro 42,2 de la GC-1, en Las Palmas de Gran Canaria, señala, han experimentado subidas del más de un 200% y de un 100%, respectivamente.

Por último, tras conocerse que el número de denuncias formuladas son mayoritariamente en autopistas y autovías y no en las carreteras secundarias, el presidente de la AEA, Mario Arnaldo, ha comentado que la DGT debería replantearse su política de radares, ya que no se está consiguiendo el objetivo de evitar los excesos de velocidad, ni los accidentes, convirtiendo los radares en meros instrumentos de recaudación.