EN ONCE ACCIDENTES
Catorce personas fallecen en las carreteras españolas durante el fin de semana
Catorce personas han fallecido en los once accidentes mortales ocurridos en las carreteras españolas desde las tres de la tarde del viernes hasta las doce de la noche del domingo, según la Dirección General de Tráfico (DGT).
El siniestro más grave ocurrió la madrugada del sábado, día 21, en la carretera C-63 a su paso por Vidreres (Barcelona), en un accidente en el que cuatro jóvenes gerundenses murieron al colisionar frontalmente el turismo en el que viajaban con una furgoneta ocupada por dos alemanes, que resultaron heridos de extrema gravedad.
Aparte de este accidente, en los otros diez siniestros registrados el fin de semana murieron diez personas, cinco de ellos motoristas, y otras diez resultaron con heridas de diversa consideración, según el balance de la DGT. Además de los jóvenes de Girona, el viernes falleció en Murcia un motorista que se salió de la vía y el sábado murieron otros tres conductores de motocicleta en otros tantos accidentes ocurridos en Castellón, uno, y dos en Sevilla.
En el accidente de Castellón, que se produjo en un choque frontal entre dos motos, uno de los conductores murió y el otro resultó herido, mientras en Sevilla se produjeron dos accidentes mortales con un fallecido en cada caso, ambos por salida de la vía del vehículo que conducían.
Además, una persona falleció en Málaga y otras dos resultaron heridas al colisionar frontalmente dos turismos y en Pontevedra, otra persona perdió la vida al salirse de la vía y chocar su turismo después. En total, el viernes murieron cinco personas y se produjeron dos heridos y el sábado hubo cinco muertos en cinco accidentes con cinco heridos.
El domingo, un peatón falleció atropellado en Tenerife y en Badajoz otra persona murió al salirse de la vía el turismo que conducía y que se incendió tras producirse un choque.
Otra persona falleció en Cádiz en el accidente que sufrió un turismo al salirse de la vía y una más murió en Pontevedra, esta vez, un anciano de 75 años que conducía un ciclomotor y pudo haber sufrido algún tipo de desvanecimiento.