Cómo ha evolucionado la seguridad en los turismos estos últimos años

• Conduce Seguro con Ponle Freno: así ha evolucionado la seguridad de Seat, del 127 al último Ibiza

Esta semana, en nuestra sección “Conduce seguro con Ponle Freno”, hemos visto cómo ha ido evolucionado la seguridad en los utilitarios compactos, desde el mítico Seat 127 hasta el nuevo Ibiza.

Para empezar, a ambos modelos los separan 50 años de historia. Y mucho ha llovido en términos de seguridad en ese tiempo. Aunque el Seat 127 ya era un referente en tecnología, diseño y seguridad en su época.

Respecto al cinturón de seguridad, en 1972, año en el que llegó el Seat 127, no era un elemento tan común como hoy en día. El 127 incorporó cinturones de seguridad de tres puntos, siendo el primer Seat de la historia que lo hacía. Además, para ser también más seguro, fue el primer modelo de la marca española de tracción delantera, algo que facilitaba la conducción. A su vez, los faros pasaron de las formas redondeadas de los modelos de su época a formas rectangulares para mejorar la eficiencia lumínica. Fue uno de los coches más seguros de los años 70.

Y así fue hasta 1984, cuando apareció la primera generación del Seat Ibiza. También fue referencia de seguridad en su segmento, incorporando en 1991, en su primer restyling, los airbags frontales, como elemento diferenciador en su categoría. Y en 1993 llegó la segunda generación del Ibiza, que trajo el control de tracción TCS y el control de estabilidad ESP, siendo el primer modelo de su segmento en equiparlos como opción.

Ya con la segunda generación, la electrónica comenzaba a hacerse su hueco. Pero fue en 2002, en esta tercera generación del Seat Ibiza, dónde más evolucionaron las “primeras a ayudas a la conducción”.

Montaba el sistema HBA, que aumentaba la presión que se ejerce sobre el pedal del freno en situaciones en las que el conductor no haya aplicado la suficiente fuerza sobre el pedal. Este sería el comienzo del asistente de frenada de emergencia de hoy en día.

La cuarta generación del Ibiza, que llegó en 2008 y, con él, le llevó a obtener cinco estrellas en los crash test de EuroNCap en la protección de ocupantes, gracias a sus numerosos elementos como los airbags laterales para proteger cabeza y tórax o una versión mejorada del ABS. También aportaba un sistema de ayuda en pendientes, luces adaptativas bixenón y sensor de aparcamiento trasero.

Y llegamos a la joya de la corona, la quinta generación del Seat Ibiza que recibió un restyling el año pasado. Para empezar, trae al segmento mejoras de seguridad como la iluminación con faros LED, de serie en toda la gama. Y asistentes a la conducción que nos pueden librar de algún que otro susto, entre los que destacan el de frenada de emergencia, el control de crucero adaptativo o el asistente de salida involuntaria de carril. Además de conectividad en todos los aspectos, con nuestro smartphone y con el mundo; ya que ahora incorpora de serie el sistema de llamada de emergencia eCall, para utilizarlo en caso de accidente a través de un botón.

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