CARRERA PONLE FRENO 2021
10 kilómetros, 10 historias
La Carrera Ponle Frenose celebra por y para las víctimas. Este año, los protagonistas son José Luis, Ángel, Antonio, Deiby, Selia, Miguel, Héctor, Marimar, Jesús, Jairo, todos ellos víctimas de accidentes de tráfico. El dinero que se recaude en la carrera irá íntegramente destinado a un proyecto del Hospital Nacional de parapléjicos de Toledo con el que les ayudaremos.
José Luis Temiño sufrió una caída cuando realizaba una ruta trail en moto un 14 de mayo. Su hermano lo recogió, y pasó dos días duros en el hospital. Pensó hasta en dejar a su novia por pena. Sin embargo, ha decidido luchar por formar una familia y tener hijos.
Ángel García es un apasionado de la mecánica y lleva más de 40 años en el taller que le dejó su padre. Sin embargo, el pasado 1 de abril fue arrollado por un coche, y no ha podido seguir trabajando en lo que más le gusta. Necesita readaptar el negocio para continuar arreglando motores y para enseñar a hacerlo.
La historia de Antonio Cabezos habla de un ex diputado autonómico y comercial al que su trabajo le ha obligado a vivir una vida de viajes. Incluso él se definía a si mismo como viajante. Sin embargo, en uno de los trayectos de vuelta, sufrió un accidente. Ahora no puede caminar. Le encantaría volver a conducir y viajar, pero para ello tiene que readaptar su vehículo.
Un conductor profesional de camiones como Deiby Rubén Pérez también sufrió un accidente que le robó la posibilidad de caminar. Era un día de lluvia y su hijo le acompañaba en el trayecto cuando perdió el control del camión. A su hijo no le pasó nada, pero conducía sin seguro... un problema que le ha llevado a una situación desesperada y de precariedad económica.
Un accidente de coche también hizo que Seila Varas quedara en silla de ruedas y perdiera a uno de sus dos hijos. A pesar de esta tragedia, ha sacado fuerzas para luchar por continuar con su trabajo, readaptar su casa y volver a conducir con el carnet adaptado.
Un apasionado del deporte y extrabajador de Telefónica como Miguel Ferrer, con 72 años, entrenaba con su bicicleta el día en que un coche le arrolló en la carretera. Tuvo la gran suerte de sobrevivir, pero ahora necesita ayuda física, cuidados y entrenamiento para cuando salga del hospital.
Héctor Esturillo, un opositor a la Policía Nacional, iba en moto cuando colisionó contra el coche de delante. Se quedó en coma cinco días, y, al despertar, descubrió que no podría volver a caminar. Sin embargo, gracias a su hija ha encontrado la fuerza para reorientar su vida y seguir adelante.
Una carretera en mal estado hizo que el coche de Mar Santos diera varias vueltas. Se partió el cuello. Es profesora de música y soprano, y este accidente ha provocado que tenga dificultades para cantar y que no pueda volver a su trabajo a menos que readapten el centro.
Jesús Damián vive en un pueblo de Guadalajara y es el único que puede desplazarlos a él y a su mujer, porque ella sufrió un accidente de tráfico que le costó un 80% de discapacidad. Desafortunadamente, Jesús sufrió una caída en su moto. Ahora necesita el carnet adaptado y modificar su coche para poder volver a desplazarse.
Jairo Checa acababa de terminar su turno en el bar donde trabajaba. A la una de la mañana, de vuelta a casa, un coche de transporte de pasajeros se saltó un semáforo en rojo y le dejó sin poder volver a caminar. Una imprudencia ajena le ha costado el trabajo, y se ha tenido que sacar el carnet adaptado.