DESHIELO PROVOCADO POR EL CAMBIO CLIMÁTICO

Unas 35.000 morsas del Pacífico se hacinan en la costa de Alaska por el deshielo en el Ártico

Las morsas son unas expertas buceadoras, pero necesitan el hielo para dar a luz, amamantar a sus crías y huir de los depredadores. El deshielo provocado por el calentamiento global ha producido una reducción considerable de la superficie necesaria para la supervivencia de esta especie, que se hacina en la costa de Alaska.

Morsas en el Ártico | Agencias

Las morsas son expertas buceadoras y con frecuencia se sumergen cientos de metros hasta el fondo de la plataforma continental para buscar alimento. Sin embargo, el hielo marino les sirve de superficie para dar a luz, amamantar a sus crías y eludir a los depredadores, y cuando es escaso o inexistente acaban refugiándose en tierra firme.

Las morsas pueden llegar a medir tres metros de largo y pesar 1.225 kilos.

El biólogo del Servicio de Pesca y Vida Salvaje de Estados Unidos Joel Garlich-Miller destacó la alta tasa de mortalidad de esta especia, causada en gran parte por estampidas.

Este movimiento de masas puede ser peligroso para las morsas jóvenes que pueden ser pisoteadas por una estampida provocada por los aviones o los depredadores, como los osos pardos y osos polares.

Se estima que la población de morsas del Pacífico puede rondar los 250.000 ejemplares.

Agencias | Madrid
| 03/10/2014