Y ASÍ CONSERVAR LA ESPECIE
La reintroducción del lince en la región mediterránea es clave para su futuro
La conservación del lince ibérico pasa por desarrollar una política de protección para esta especie. España y Portugal deben diseñar una estrategia para reintroducir este felino en la región mediterránea, la vertiente que menos ejemplares conserva.
Las conclusiones del V Seminario Internacional sobre Conservación del Lince Ibérico destacan la importancia de reintroducir al lince ibérico en la región mediterránea, una acción primordial para la conservación de la especie.
El foro, celebrado en Sevilla, ha resaltado la necesidad de impulsar el crecimiento de las poblaciones autóctonas y las creadas por reintroducción de ejemplares.
Para ello, es imprescindible vigilar la conexión (natural y asistida) de las subpoblaciones de linces de la región mediterránea con el resto de poblaciones que habitan en la península ibérica.
Todos los linces ibéricos, silvestres o en cautividad, deben ser considerados como parte de una única metapoblación, que deberá ser sometida a un manejo común, y en la que debe ser fundamental minimizar la consanguinidad y maximizar la diversidad genética.
Los conejos, principal alimento de los linces
No menos importante, es la necesidad de aumentar el conocimiento sobre la demografía y las enfermedades del conejo, para poder aumentar la eficacia de las medidas de conservación de la especie y fortalecer así las poblaciones de linces.
En las conclusiones del seminario se subraya también que la recuperación del lince ibérico "es un caso de éxito, si bien no es percibida siempre así por la sociedad, por lo que se considera necesario mejorar su comunicación".